Por Moisés G. Hernández
Mientras muchos luchamos como pequeños habitantes de una tierra digital contra jóvenes gigantes llamados algoritmos, un tipo ya maduro observa, sentado en una banca, la incesante pelea en la arena, con una leve sonrisa en la cara: es el e-mail marketing.
No es un tipo fácil, pero sí más confiable y predecible.
Y las estadísticas más recientes indican que hay larga vida para este medio a veces ignorado ante la popularidad de las redes sociales del momento.
Según el sitio web Statista.com, en 2020 el mercado mundial de e-mail marketing se valoró en USD 7.500 millones y proyecta que la cifra aumentaría a USD 17.900 millones en 2027.
Por mi experiencia, puedo decir que desde que implementé el marketing de correo electrónico en mi lugar de trabajo como una estrategia para crear relevancia de marca, noté sus beneficios: aumento de las visitas recurrentes a la web, fidelidad de los suscriptores e interacciones.
Es emocionante ver el comportamiento de tus suscriptores con cada campaña enviada. Y más emocionante aún es cuando te responden los e-mails para agradecerte por el contenido.
Pero hablemos de lo que te ha traído aquí. ¿Por qué debes considerar este canal en tu estrategia de marketing digital?
1.- No luchas contra algoritmos caprichosos
Si manejas redes sociales, sabes que con las publicaciones orgánicas tienes un alcance muy limitado. Todo depende del bendito algoritmo.
Tienes que “bailar al son que te toquen”. ¿Quieres alcance? Paga.
Con el e-mail marketing lo que necesitas es creatividad para escribir tus asuntos y saber cuáles son esas palabras que podrían llevarse tu correo a la basura. A la primera tal vez no saldrá, pero la experiencia te lo dirá, campaña tras campaña. Eres tú y tu público.
2.- El e-mail marketing es personal
Esta es una relación de uno a uno. Un mensaje, una cuenta.
La bandeja de entrada de tu suscriptor es como su casa. Llegas ahí porque esa persona te lo permitió.
Es el marketing de permiso, término acuñado por un señor llamado Seth Godin. Esto quiere decir que tu destinatario te autorizó para enviarle correos. Te dio sus datos, y bien sabes que esto es tan sagrado como entrar a la casa de alguien.
3.- No hay distracciones
Sí, diariamente llegan muchos mensajes a la bandeja de entrada.
Sin embargo, por experiencia propia sabes que cuando abres un e-mail solo lees ese mensaje. ¿Pasa lo mismo cuando entras, digamos, a Instagram?
Es emocionante ver el comportamiento de tus suscriptores con cada campaña enviada. Y más emocionante aún es cuando te responden los e-mails para agradecerte por el contenido.
Los algoritmos de las redes sociales muestran sólo aquellas publicaciones con las cuales los usuarios interactúan más. Tú no tienes el control sobre ello.
Nuevamente, con el e-mail marketing tienes la atención plena del usuario.
4.- Los contactos son tuyos
Me causa mucha gracia esa obsesión con el número de seguidores en redes sociales, al punto de usarlo como métrica fundamental. A ver, ¿cuántas de esas personas conectan realmente contigo?
No es que esté mal incrementar la cantidad de personas que nos siguen, pero no es una métrica que valga mucho la pena si no hay una conexión real con tu negocio.
La lista de suscriptores es tuya. Son tus contactos. No hay algoritmo que la derrumbe.
A eso debes apuntar cuando alguien visite tu web, así como también en cada evento virtual que hagas, por ejemplo.
5.- Puedes segmentar tus mensajes
Con el marketing por correo electrónico puedes segmentar para llegar a la audiencia correcta.
En plataformas como Mailchimp, esto puede ser tan sencillo como etiquetar a usuarios que hagan determinada acción.
Supongamos que tu negocio es de artículos deportivos y organizaste un evento para quienes son aficionados a correr en montaña. En este caso, puedes crear una página de inscripciones (una landing page) dentro del mismo Mailchimp y configurarla para que etiquete automáticamente a cada suscriptor. Esas etiquetas te servirán para enviar correos a potenciales clientes, que estén interesados, por ejemplo, en artículos que mejorarán su desempeño en ese deporte.
Según esa plataforma de marketing, las campañas segmentadas según el interés de los usuarios tienen una tasa de apertura de 74,53% más alta que aquellas que no están segmentadas. La tasa de apertura es una métrica que refleja la cantidad de e-mails abiertos sobre el número total de correos enviados en esa campaña.
6.- Tráfico continuo a tu web
Más arriba te decía que comprobé que con una estrategia de e-mail marketing he logrado mantener las visitas recurrentes a una web que tengo a cargo.
No es que esté mal incrementar la cantidad de personas que nos siguen, pero no es una métrica que valga mucho la pena si no hay una conexión real con tu negocio.
Tal vez te gastaste todos tus ahorros para desarrollar tu blog o sitio web, y en tu pecho no quepa el orgullo que sientes por tu creación. De repente tiene un tráfico que hace morir de envidia al mismísimo Amazon. Sí, es una exageración. Lo que quiero decirte es que si no tienes los datos de tus visitantes, no habrá manera de conectarte con ellos y fidelizarlos.
Con las visitas continuas a tu web tienes exposición de tu marca y, por supuesto, más oportunidades de vender.
7.- Más ventas
Empresas y consultores de marketing digital utilizan esta vía para vender.
De acuerdo con HubSpot, el e-mail marketing genera el retorno de inversión más alto para las pequeñas empresas. Y fíjate muy bien que indica que son pequeñas, no GRANDES compañías.
Expertos de la industria indican que en 2019 había 3.900 millones de usuarios de e-mail en todo el mundo, y para 2024 estiman que esa cifra crecerá a casi 4.500 millones de usuarios.
Aquí hay una gran oportunidad.
En resumen
Bien hecho, el marketing por correo electrónico no es spam.
Aunque hay otras cosas que cuidar, como la redacción de un asunto relevante, esto no se compara con luchar con un algoritmo cambiante que te obliga a pautar publicidad para lograr alcance en una red social.
El correo es personal. Te ayuda a mantener una comunicación estrecha con tu público para fidelizarlo.
Siempre que escribas un buen texto, es más fácil mantener la atención de tu lector en un correo que en una publicación de redes sociales, donde hay más distracciones.
No hay manera de llevarte a otra parte tus cientos o miles de seguidores en redes sociales. Con el e-mail marketing sí. Además, puedes enviarles mensajes personalizados mediante una segmentación.
Con el marketing por correo electrónico puedes tener un tráfico recurrente a tu web, lo que se puede traducir en relevancia de marca y ventas.
¿Te animas a implementar una estrategia de e-mail marketing para tu negocio, o prefieres seguir peleando con los algoritmos? Déjame tu opinión en la sección de comentarios 👇.